18 jul 2011

Fresneda es otra cosa

Parece mentira que desde el ámbito sanitario se descalifique con tan pocos argumentos y dejando tan clara la propia ignorancia sobre los determinantes de salud a un proyecto como el del Centro de Salud Fresneda. Acá va una recogida de firmas de apoyo:


Cuestionan en prensa la legitimidad de actividades comunitarias en los Centros de Salud.


MANIFIESTO DE LA FRESNEDA:

POR LA LEGITIMIDAD DE INCLUIR ACTIVIDADES COMUNITARIAS DE PROMOCIÓN DE LA SALUD EN LOS CENTROS SANITARIOS



A la vista de la batalla abierta en la prensa asturiana (La Nueva España, La Voz de Asturias, El Comercio, RTPA)*, por algún sindicato y varios sanitarios del Centro de Salud contra el Proyecto Fresneda (una iniciativa de promoción de estilos de vida saludables liderada por voluntarios y por el propio Director de Gestión del Centro), por considerarla impropia de un Centro sanitario o bajo el pretexto de que pudiera hacer peligrar la custodia de datos confidenciales o de que no es adecuado abrir el Centro fuera de los horarios de consulta, ante la opinión pública y la administración sanitaria queremos manifestar lo siguiente:

1. Valoramos como un gran apoyo para la salud de la gente, las actividades lideradas por promotores comunitarios (en particular las del Proyecto Fresneda que conocemos por ser usuarios, o a través de la web, redes sociales, congresos u otros)

2. Sin ser sanitarios (o siéndolo), sabemos que sobran pruebas científicas que avalen los beneficios para la salud de los grupos para dejar de fumar, de practicar yoga, pilates o tai-chi, de bailar, de los grupos de apoyo para la lactancia materna, etc. y muchos de nosotros los comprobamos diariamente en nuestras vidas.

3. Entendemos, como ciudadanos, que allí donde haya espacios libres o poco utilizados en centros sanitarios y confluyan participación ciudadana y liderazgo profesional, es plenamente legítimo y deseable, que se usen para actividades de salud comunitaria, entre otras razones, porque:

-Es económico: aprovecha recursos preexistentes con costes prácticamente nulos.
-Se percibe mejor su carácter saludable, al estar ligadas a un centro sanitario.
-Facilita la coordinación entre profesionales y promotores comunitarios.
-Enriquece la función de los Centros de Salud como puntos de encuentro y de dinamización comunitaria.
-Permite a las personas con menos recursos, acceder a actividades saludables gratuitas, que en la comunidad pueden no existir o tener costes más elevados.

4. Consideramos que la realización de actividades comunitarias fuera de horario laboral y supervisadas por un profesional sanitario, es legítima y favorece la accesibilidad.

5. Los usuarios de los Centro de Salud no vamos allí a usar ordenadores ni a entrar en las historias clinicas que suponemos estén protegidas por claves de acceso. Vamos a cuidar de nuestra salud. Nos parece inaceptable que hechos tan anecdóticos como encontrar un ordenador encendido (no una historia abierta) se utilicen para desprestigiar la salud comunitaria, el funcionamiento de un centro que ha acreditado altos niveles de calidad, de satisfacción de los usuarios y de compromiso social y comunitario, como es el caso del Centro de Salud de La Fresneda.

6. Y ante todo, apreciamos la generosidad de las personas voluntarias que, en cualquier parter del mundo, son capaces de entregar de forma altruista tantos miles de horas de sus vidas a actividades tan nobles y beneficiosas para la gente.


*La Nueva España: http://www.lne.es/sociedad-cultura/2011/07/15/sindicatos-denuncian-centro-salud-fresneda-organizan-bailes/1102964.html
*La Voz de Asturias: http://www.lavozdeasturias.es/asturias/Medicos-Fresneda-temen-filtraciones-clinicos_0_517148301.html
*ElComercio: http://www.elcomercio.es/agencias/20110714/asturias/junta-personal-denuncia-pesima-gestion_201107141307.htmlE
*RTPA : http://www.rtpa.es/asturias:Denuncian-la-%22pesima-gestion-y-dejadez%22-de-sanidad-asturiana_111310644942.html

15 jul 2011

El p-patient

Una nueva perla aparecida en médico crítico:

Del e-patient al p-patient... o el periplo del error de foco



El p-patient (poor-patient) es un tipo de paciente muy frecuente en nuestras consultas del centro de salud y hospitales, pero lo será mucho más en los próximos años. El tipo de consultas más frecuentes en el p-patient suelen estar relacionadas con afecciones cardiovasculares, trastornos por somatización y consultas encuadrables dentro del ámbito de lo psicosocial.

El p-patient no demanda relacionarse con su médico por correo electrónico ni que la consejería de salud de su comunidad autónoma se gaste chorrocientos mil euros en redes sociales de pacientes o plataformas virtuales que lo empoderen. En realidad el p-patient en muchas ocasiones no sabrá siquiera deletrear la palabra “empoderar”.

Al p-patient no se le organizan congresos o jornadas, no se le escriben libros y ninguno de ellos se convertirá en un conferenciante de éxito. Lo más que logrará algún p-patient será encontrar un médico que entienda qué es lo que se esconde detrás de sus dolencias (e incluso delante). Lo más que se logrará para los p-patients será bajar la tasa de paro, remodelar edificios de 8 plantas sin ascensor o subir el salario mínimo interprofesional.

¿Que hay que prestarle atención también al e-patient (paciente que usa internet)? No me cabe duda, pero las diferentes atenciones que se le prestan a unos pacientes (e-patients) y a otros (p-patients) me hacen ver que seguimos fomentando un modelo de sistema sanitario que tapa más a quien menos frío tiene.

12 jul 2011

En la encrucijada

Aunque en el marco que plantea de "trabajadores sociales" pudiera parecer que los sanitarios se escapan, creo que merece la pena recoger esta reflexión de Guattari sobre la necesidad de ser conscientes del papel que jugamos los profesionales de estos campos a nivel político y, sobre todo, micropolítico. Esta tomado de Micropolíticas. Cartografías del deseo


"Aquellos a los que se ha convenido en llamar «trabajadores sociales» —periodistas, todo tipo de psicólogos, asistentes sociales, educadores, animadores, gente que desarrolla cualquier tipo de trabajo pedagógico o cultural en comunidades de periferia, en los barrios de viviendas sociales, etc.— actúan de alguna manera en la producción de subjetividad. ¿Pero quién no trabaja en la producción social de subjetividad? No veo inconveniente en eso, ya que es inevitable a estas alturas.


(...)


Debemos interpelar a todos aquellos que ocupan una posición docente en las ciencias sociales y psicológicas, o en el campo del trabajo social, todos aquellos cuya profesión consiste en interesarse por el discurso del otro. Se encuentran en una encrucijada política y micropolítica fundamental. O hacen el juego a esa reproducción de modelos que no nos permiten crear salidas a los procesos de singularización o, por el contrario, trabajan para el funcionamiento de esos procesos en la medida de sus posibilidades y de los agenciamientos que consigan poner a funcionar. Eso quiere decir que no hay objetividad científica alguna en ese campo, ni una supuesta neutralidad en la relación, como la supuesta neutralidad analítica.


En realidad, esas teorías sirven para justificar y legitimar la existencia de esas profesiones especializadas, de esos equipamientos discriminadores y, por lo tanto, de la marginalidad de algunos sectores de la población. Las personas que, en los sistemas terapéuticos o en la universidad, se consideran simples depositarias de un saber científico o simples canales de transmisión del mismo, sólo por eso, ya hicieron una opción reaccionaria. Sea cual sea su inocencia o su buena voluntad, ocupan efectivamente una posición de refuerzo de los sistemas de producción de la subjetividad dominante.


(...)


Desde el punto de vista micropolítico cualquier praxis puede ser o no policíaca; ningún cuerpo científico, ningún cuerpo de referencia tecnológica garantiza una justa orientación."

11 jul 2011

El absurdo que da frutos

Hablando de sostenibilidad... En Oregón asumieron en el 2008 que no era posible incluir a todos los que no estaban asegurados en el programa de Medicaid, así que... ¡decidieron sortear 10.000 seguros gratuitos entre las 90.000 solicitudes! El caso es que el asunto ha permitido comparar las diferencias en cuanto al uso del sistema sanitario y resultados en salud entre los afortunados y los no afortunados. La primera revisión de los datos aporta estos resultados: mayor uso de los recursos sanitarios, menor deuda contraida por razones médicas, y una mejor percepción de salud física y mental entre los agraciados en la lotería. Ahí van algunas notas:

The study became possible because of an unusual situation in Oregon. In 2008, the state wanted to expand its Medicaid program to include more uninsured people but could afford to add only 10,000 to its rolls. Yet nearly 90,000 applied. Oregon decided to select the 10,000 by lottery.

Economists were electrified. Here was their chance to compare those who got insurance with those who were randomly assigned to go without it. No one had ever done anything like that before, in part because it would be considered unethical to devise a study that would explicitly deny some people coverage while giving it to others.

But this situation was perfect for assessing the impact of Medicaid, said Katherine Baicker, professor of health economics at the Harvard School of Public Health. Dr. Baicker and Amy Finkelstein, professor of economics at M.I.T., are the principal investigators for the study.

El informe:

http://www.nber.org/papers/w17190.pdf?new_window=1

Fuera las manos...

Una nueva convocatoria frente al expolio de lo público:

El pasado lunes 27 de junio, para conseguir los votos que le permiten ampliar la edad de jubilación a los 67 años, el PSOE  pactó con CIU que la propiedad de los  más de 600 inmuebles  (hospitales, ambulatorios, ..) del patrimonio de la Seguridad Social (conseguido durante décadas con las cuotas de l@s trabajador@s) va a ser entregada a las Comunidades Autónomas, que  podrán venderlos o dedicarlos a un uso no sanitario.


Es decir, las  Comunidades Autónomas, arruinadas en muchos casos por gastos inconfesables, acabarán en poco tiempo con nuestro patrimonio, para “hacer caja”  y poder continuar con sus negocios y su corrupción.


Lo podrán hacer de diferentes maneras: vendiéndolos a empresas privadas (como ya han anunciado en Cataluña, donde venderán los 7 grandes hospitales públicos por 300 o 400 millones de €, para luego “alquilarlos” para uso sanitario), o simplemente vendiéndolos con fines especulativos.

¿Imagina alguien las tentaciones de negocio inmobiliario del gobierno de Esperanza Aguirre, por ejemplo con un solar como el del Hospital La Paz, al lado de donde se han construido los rascacielos más altos de Madrid?

CONCENTRACIÓN POR LO QUE ES NUESTRO!
Jueves 14 de julio, 19:30
Frente al Ministerio de Trabajo: Pº de la Castellana.
Nuevos Ministerios o Gregorio Marañón.

Convocan:
CAS Madrid
Matusalen
Grupo de Trabajo de Salud - Sol

6 jul 2011

Un sistema sostenible

En estos tiempos en los que desde tantos medios contrainforman sobre la situación del sistema sanitario, invitando a considerar medidas cortoplacistas y recortes, merece la pena rescatar los datos ofrecidos por la FADSP en La sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud, que al menos no está financiado por ninguna empresa como muchos de los demás estudios que se manejan. 

Pero en todo este barullo de cifras y datos conviene no olvidar cuáles son las prioridades. Y aunque es cierto que el sistema debe ser sostenible para poder seguir existiendo, si se entiende esto sólo en términos económicos vamos apañados. Es necesario entender la sostenibilidad en el sistema sanitario de una manera más amplia, incluyendo otras dimensiones, como la social, la ecológica, la ciudadana...

Así, basándose en datos que ya se conocen desde hace mucho tiempo, es necesario poner encima de la mesa no sólo los déficits económicos posibles, sino también los sociales. Las clases sociales más bajas tienen peor salud, más probabilidad de ser diagnosticados de alguna enfermedad crónica, la salud (o mejor dicho, la falta de ella) interfiere más en sus actividades cotidianas... Y esto, pese a que se sabe desde hace tiempo, sigue siendo una constante a día de hoy, como muestra el estudio Gallup. ¿Para cuando plantear este déficit como un reto de alta prioridad? ¿Es también en este caso la privatización la solución, o un factor agravante del problema?

En este sentido es interesante el artículo que se recoge en Salud Comunitaria, aparecido en el American Journal of Public Health, y que calcula el número de muertes en EEUU causadas por factores sociales. Como se publica en la reseña que sobre el mismo hacen en el New York Times:


“Esto debería ser una lente util para focalizar nuestros pensamientos” dijo Dr. Galea que es el jefe del departamento de epidemiología en la Mailman School of Public Health at Columbia University. “Si dices que 193,000 muertes son debidas a problemas cardíacos , entonces los problemas cardíacos importan. Si tu dices que 300,000 muertes son debidas a obesidad, entonces la obesidad importa”

“Y si  291,000 muertes son debidas a la pobreza y las desigualdades en ingresos, entonces esos factores también serán importantes”