Después de haber publicado la entrada anterior, justo me mandan un artículo aparecido en Nature bajo el título de "Cholesterol limits lose their lustre". En él se habla de como en el año 2002, con la publicación en EEUU de la Adult Treatment Panel (ATP) III, se fijaron unos objetivos de colesterol LDL muy bajos, asumiendo que reduciendo ese factor de riesgo que se nos ha vendido como el principal responsable de los problemas cardiocirculatorios, se reduciría automáticamente el riesgo de que estos problemas se produjeran. Pero parece ser que ahora, de cara a la elaboración de la ATP IV, cada vez hay más voces que piden que se rectifique, ya que no parece que esta relación esté tan clara. De hecho la reducción de la mortalidad que producen las estatinas parece que no se da con otros hipolipemiantes, lo cual hace pensar en otra acción complementaria de esa familia de medicamentos (quizás su efecto antiinflamatorio, por ejemplo).
Es lo que ocurre cuando frente a problemas complejos (y los de salud siempre lo son) se ofrecen respuestas simplonas. Que al cabo de un tiempo se evidencia su falta de consistencia.
Así es necesario "complejizar" la mirada, al mismo tiempo que desproblematizamos la vida de muchas personas que pasan por la consulta acumulando "regalos" por parte de l@s médic@s. En este sentido, una línea recogida en el artículo apunta a tomar la decisión de poner o no tratamiento con estatinas a partir de una evaluación del estado circulatorio más elaborado. Como dice uno de los médicos preguntados: "Si tus arterias y tu corazón están sanos, me da lo mismo tu LDL o tu tensión arterial".
Pero lo más importante a recordar es la necesidad de poner en perspectiva las "verdades médicas". Así cierra el artículo el director de un servicio de análisis clínicos, al mismo tiempo paciente con el colesterol rebelde: "Algunas veces querría llamar a mi médico y decirle que no se preocupe sobre los niveles óptimos de colesterol. De todas maneras van a cambiar muy pronto".
Sera por eso el caso de pacientes que son obesos en ocasiones extremos que nos sorprenden con cifras de lipidos dentro de rangos normales normotensos y cardiovascular aparentemente dentro de la normalidad, pero por cuanto tiempo?
ResponderEliminar